martes, 12 de mayo de 2020

La Pinacoteca Antigua de Múnich


La Pinacoteca Antigua de Múnich (Alte Pinakothek, en alemán) es una pinacoteca situada en Múnich (Alemania), considerada el gran museo de «pintura antigua» de la capital bávara, por cuanto sus colecciones abarcan desde época medieval hasta principios del siglo XIX. Es la más importante pinacoteca alemana y una de las más destacadas del mundo.

El edificio

Su construcción, con dos plantas y en estilo neoclásico, se inició en 1826, el día 7 de abril, en que se conmemoraba la muerte de Rafael. El proyecto lo llevó a cabo el arquitecto Leo von Klenze por encargo de Luis I de Baviera, quién veía que su colección iba en aumento y la Kammergalerie de su residencia quedaba pequeña, si bien otra motivación del monarca fue el convertir a Múnich en la «Atenas del Istar». En su época llegó a ser la mayor galería de pintura de Europa. Sin embargo, sufrió tantos desperfectos durante la Segunda Guerra Mundial que se consideró su demolición, aunque finalmente fue reconstruido durante los años cincuenta (1952 a 1957) por el arquitecto Hans Döllgast. En 1994 se cerró de nuevo para una renovación que afectó tanto a los espacios como a las obras.
Las colecciones
Es destacable su colección de primitivos maestros alemanes, con autores en activo desde mediados del siglo XIV hasta 1550, que dejaron sentir su influencia no solo en Alemania sino en toda el área germana de la época y aún del RomanticismoAlbrecht Altdorfer (La batalla de Alejandro en Issos), Lucas CranachMatthias GrünewaldHans Holbein son los principales autores, entre los que sobresale Alberto Durero (Retablo PaumgartnerAutorretrato con pellizaLos cuatro apóstoles, etc.).
También la pintura flamenca está muy bien nutrida, especialmente la del siglo XVII. Obras de primitivos flamencos presentes en la colección son las de Rogier van der WeydenLucas van Leyden y Jan Gossaert. En cuanto a barroco encontramos obras de Rubens (El rapto de las hijas de Leucipo), Van Dyck y Jacob Jordaens entre otros.
No falta la pintura italiana, representada en todos sus periodos con autores de la talla de GiottoFra AngelicoBotticelliLeonardo (La Madonna del clavel), Rafael (Sagrada Familia de Canigiani), los Carracci y Tiziano (La coronación de espinas).
La fuerte presencia de la pintura española en la colección está justificada tanto por la calidad de las obras, especialmente las del Siglo de Oro, como por el hecho de que Baviera formaba parte de los territorios de los Habsburgo, casa reinante también en España. Un cuadro de Velázquez (el inacabado Retrato de hombre joven), algunas de las más extraordinarias escenas de género de Murillo (Niños comiendo uvas y melón, Anciana espulgando a su nieto o Niños jugando a los dados), un San Francisco de Asís de Zurbarán, el Vendedor de cuadros de José Antolínez y el retrato de María Teresa de Vallabriga de Goya son algunos de los más notables.



Historia

La Alte Pinakothek en 1900.
Además del iniciador de la colección, otras aportaciones importantes vinieron de la mano del primer príncipe elector de Baviera, Maximiliano I, con obras de Alberto Durero; de su nieto, Maximiliano II Manuel, que compró 105 obras en 1689 entre las que destacaban tres de Rubens; de la dote de Ana María Luisa de Toscana, esposa del elector del Palatinado, Juan Guillermo (16791718); de la herencia de Maximiliano IV José, primer Rey de Baviera; de la incorporación de los bienes de las órdenes eclesiásticas y de aportaciones de otras familias aristocráticas. Durante el siglo XIX se interrumpieron las adquisiciones, reanudadas solo en parte a finales de ese siglo. Tras los destrozos causados por la Segunda Guerra Mundial los gastos se destinaron a la restauración del museo, reanudándose la adquisición de obras a finales del siglo XX gracias a fondos especiales del estado alemán, si bien en los años 60 se incorporaría una colección de pinturas del siglo XVIII del Bayerische Hypotheken und Vereinsbank. En 1994 algunas de sus obras pasaron a la Neue Pinakothek, dedicada al arte de los siglos XIX y XX.






Las colecciones

Es destacable su colección de primitivos maestros alemanes, con autores en activo desde mediados del siglo XIV hasta 1550, que dejaron sentir su influencia no solo en Alemania sino en toda el área germana de la época y aún del RomanticismoAlbrecht Altdorfer (La batalla de Alejandro en Issos), Lucas CranachMatthias GrünewaldHans Holbein son los principales autores, entre los que sobresale Alberto Durero (Retablo PaumgartnerAutorretrato con pellizaLos cuatro apóstoles, etc.).
También la pintura flamenca está muy bien nutrida, especialmente la del siglo XVII. Obras de primitivos flamencos presentes en la colección son las de Rogier van der WeydenLucas van Leyden y Jan Gossaert. En cuanto a barroco encontramos obras de Rubens (El rapto de las hijas de Leucipo), Van Dyck y Jacob Jordaens entre otros.
No falta la pintura italiana, representada en todos sus periodos con autores de la talla de GiottoFra AngelicoBotticelliLeonardo (La Madonna del clavel), Rafael (Sagrada Familia de Canigiani), los Carracci y Tiziano (La coronación de espinas).
La fuerte presencia de la pintura española en la colección está justificada tanto por la calidad de las obras, especialmente las del Siglo de Oro, como por el hecho de que Baviera formaba parte de los territorios de los Habsburgo, casa reinante también en España. Un cuadro de Velázquez (el inacabado Retrato de hombre joven), algunas de las más extraordinarias escenas de género de Murillo (Niños comiendo uvas y melón, Anciana espulgando a su nieto o Niños jugando a los dados), un San Francisco de Asís de Zurbarán, el Vendedor de cuadros de José Antolínez y el retrato de María Teresa de Vallabriga de Goya son algunos de los más notables.

No hay comentarios:

Publicar un comentario